RELATOS CORTOS DE CIERTOS PERSONAJES

MUNDO DESTINO DIECISÉIS 


Preludio de los portadores de la esencia de los Niños Perdidos

(Pensamientos anónimos de un portador)

Entre las sombras del viejo nogal y las zarzamoras que la ocultaban, Antonio se adentró en una zona olvidada que todos parecían obviar. Su amigo solía intercambiar cuentos de viejas leyendas sobre la cueva que se encontraría, pero para Antonio, quien había devorado todos los libros de mitos y leyendas locales en la biblioteca, esa cueva no era un lugar de temor, sino una promesa de descubrimiento.

Al llegar a la entrada, se detuvo. Su respiración, visible en el aire frío, se mezclaba con la bruma que emanaba de la oscuridad. Una decisión lo separaba de un mundo que, hasta este momento, solo había habitado en los confines de su imaginación. Los detalles de la roca, húmedos y cubiertos de musgo, parecían casi palpitar en anticipación, o tal vez era el latido acelerado de su propio corazón lo que lo hacía pensar así.

Sin una palabra, sin siquiera un bisbiseo de advertencia, él avanzó, al principio temeroso. La oscuridad lo engulló como si el mundo detrás de él hubiese cerrado sus puertas. Sus manos, extendidas, tocaron las paredes frías de la cueva y lentamente sus ojos comenzaron a ajustarse... CONTINUARÁ...


Preludio de los portadores de la esencia de los Niños Perdidos

La leve bruma de esa mañana no hacía más que añadir un toque melancólico al paisaje que Miguel observaba a través de la ventana empañada de su anticuado dormitorio. La vista desdibujada de los árboles y el débil sonido de la lluvia que golpeaba contra el cristal resonaba como un eco de su propio desaliento interior. Miguel todavía era demasiado joven como para haber perdido tanto en tan poco tiempo.

Ayer, en la ceniza grisácea del oscurecer, su fiel compañero Riddick había partido hacia el más allá. Un adiós susurrado en la serenidad de su cuarto y que dejaba un vacío latente en su pecho que nada ni nadie podría rellenar. Su padre, un hombre que una vez fue su héroe, se había perdido en la sinrazón y el resentimiento mucho antes del último suspiro cuerdo de su madre... CONTINUARÁ...


Preludio de los portadores de la esencia de los Niños Perdidos

(Pensamientos anónimos de un portador)

Profundidades insondables envolvían a Olga en el oscuro abismo del océano Primigenio; lugar meramente iluminado por el poco resplandor que llegaba del exterior, el cual era complementado por el resplandor intermitente de criaturas bioluminiscentes y la presencia inamovible y brillante del titánico Monolito Zaz.

Bajo la vigilancia constante del Kraken Oz; eterno guardián de su hogar, Olga nadaba entre corrientes frías y saladas mientras soñaba con el mundo que jamás había tocado, pero que creía visitar cada noche en sus sueños más profundos.

Cada sueño era un retorno a ese atardecer eterno, donde una hoguera mágica crepitaba pacíficamente y el viento del atardecer eterno susurraba entre las espigas de un campo de trigo interminable.

Olga, en esos sueños, no era simplemente una espectadora más; era parte de aquella tierra y sentía el calor del fuego sobre una piel que nunca había sentido esa sensación. Las paredes infinitas del sueño no eran barreras, sino el lienzo en blanco de posibilidades en el que pintaba su esperanza y el deseo de comunión entre seres de dos mundos tan distintos como el agua y la tierra... CONTINUARÁ...


Preludio de los portadores de la esencia de los Niños Perdidos

(Pensamientos anónimos de un portador)

En la vastedad del desierto de la región de Gameluza, el sol se despedía con un embrujo de colores cálidos y derramaba su calor sobre las doradas arenas que se extendían hasta donde la vista alcanza. No había más ruido que el susurro del viento danzando entre las dunas y un viento que parecía llevar consigo secretos de tiempos y héroes olvidados.

Desde su jaima, Laura observaba el cielo nocturno. Las estrellas titilaban como faroles suspendidos en un mar oscuro e iluminaban su esperanza y su ansiedad. Cada constelación tenía una historia, y en una noche clara como aquella, parecía que podían contarse todas. Pero una historia en particular ocupaba su mente, una historia no escrita en las estrellas, sino en el linaje de su propia sangre.

Laura nunca había visto en persona su abuelo, el Santo Aguerrido Morgan, pero creció escuchando las epopeyas de sus batallas; de cómo había forjado alianzas con reinos distantes y enfrentado criaturas que solo podrían existir en las pesadillas de los mortales comunes... CONTINUARÁ...


En algún lugar de la Montaña de Cristal...

(Reflexiones anónimas de una recién llegada)

En el ombligo de un mundo desconocido donde los cielos se retorcían en espirales de colores imposibles y las criaturas desafiaban cada ley de la naturaleza conocida por un ser humano, María caminaba con un propósito. Su llegada accidental a este reino fantástico la había separado de su hija y, aunque cada respiración le recordaba su ausencia, tenía que encontrar el modo de volver.

Las criaturas de este mundo la observaban con una mezcla de curiosidad y desdén. En sus ojos, ella veía reflejado no solo el miedo a lo desconocido, sino también el eco de su propio juicio hacia ellas. Cada interacción revelaba una capa adicional de prejuicios y temores que, si bien eran dirigidos hacia ella, parecían ser un reflejo de su sociedad.

Pero había esperanza. Los niños de este mundo, criaturas con ojos grandes y transparentes como cristales puros, aún no estaban manchados por las sombras de sus mayores. Jugaban con María y le enseñaban las maravillas de su mundo dentro de aquella titánica montaña de cristal. Durante esos momentos, ella veía una chispa de lo que podrían llegar a ser, una esperanza libre del veneno que inyectaban sus padres en sus jóvenes mentes en pleno desarrollo… CONTINUARÁ...


Reflexiones de un incansable viajero

(En algún lugar del planeta Destino dieciséis)

Morgan avanzaba a paso firme por el intrincado laberinto verde de la jungla de Bolinia, donde la luz del sol se filtraba perezosamente a través de la espesura del follaje y apenas tocaba el suelo húmedo. Su figura, alta y delgada, se deslizaba como si el denso barro y las raíces retorcidas no fueran más que partículas de un sueño lejano. No se quejaba, ni siquiera cuando el corte de una liana traicionera dejaba una marca nueva en su oscura piel curtida.

Cada paso que daba era un recordatorio de su viaje, no solo a través de esa jungla inmensa, sino a través de su vida. Morgan había sido una vez un joven soñador con más bravuconería que sabiduría; un chico que desafió el destino dictado por las expectativas familiares y sociales... CONTINUARÁ…


Reflexiones anónimas de un extraño viajero

(En algún lugar del extenso Reino Alminillah)

En los confines ocultos de algún lugar de Destino Dieciséis, Rick El Rojo, meditaba sobre las llamas eternas que susurraban oscuros secretos. Su esencia, un tiempo infinito vinculado al fervor del fuego, incrementaba progresivamente el potencial dentro de su forma mundana.

Desde el incidente, su poder no era el mismo, pero bien sabía que pronto recuperaría todas sus fuerzas y sus flamas alcanzarían la misma ferocidad que antes.

En su retorno a la civilización humana se dio cuenta de que esta había florecido en su ausencia; ciudades expansivas y sociedades complejas se extendían como telas de araña sobre la tierra y es que, los seres humanos, con sus ingeniosas ideas y sus corazones llenos de ambiciones desmedidas, ofrecían un escenario donde tendría la posibilidad de recabar los recursos necesarios para no levantar la sospecha... CONTINUARÁ...


Cuando todo comenzó

En el vacío primordial, donde la oscuridad era más un estado del ser que la ausencia de luz, algo despertaba. No un ser de carne y hueso, sino una consciencia; un susurro primigenio de existencia que luchaba por afirmarse en lo que podría considerarse un infinito, sin rumbo ni rostro.

Esta consciencia, si así se le pudiera llamar, conocía el frío, no por la sensación táctil que los seres vivos experimentan, sino como un frío metafísico, un abandono, la falta de todo lo que podría ser y aún no era. Su agonía no era física, sino existencial, una presión aplastante de no ser nada, aun teniendo la potencialidad de ser el todo.    CONTINUARÁ…

Ecos de inconsciencia

(En algún lugar del profundo océano Primigenio)

Las profundidades del océano Primigenio eran el hogar de una criatura gigantesca y monstruosa que parecía tener la misma edad que los propios Dioses Elementales. Esa bestia, cuyas extremidades ondulantes y ojos brillantes acechaban los abismos marinos, se deslizaba como una sombra y recorría el Monolito Zaz como su eterno guardián inmortal. Impulsado únicamente por instintos ancestrales que tejían su existencia en un tapiz de salvajismo incontrolado, solo el azar dictó un ápice de luz en su consciencia.

Cuando ocurrió aquello, se dio cuenta de que la oscuridad que lo envolvía no era más que un manto que cubría su tormento incompresible que se traducía en la tremenda locura primaria que siempre mantenía.... CONTINUARÁ...


Inocentes pensamientos

(En algún lugar de Galapia)

Cuando las primeras luces del alba tejían hilos de oro en el cabello de Dargor, Raven lo espiaba tras los carromatos del campamento. Este preparaba meticulosamente los caballos para la jornada y aunque había visto hacerlo incontables veces, hoy había algo casi ceremonial en sus maniobras.

Raven recordaba los cuentos que resonaban en las tabernas y en las plazas de mercado: Dargor, el invencible, cuya espada dentada era guiada por los antiguos Dioses Elementales.

Aunque estos dioses habían desaparecido hace muchos años, algún instinto primitivo en Raven lo empujaba a susurrar una plegaria para que los vestigios de su poder todavía protegieran al guerrero santo. Observarlo era para él como ver una parte del pasado y un fragmento vivo de su leyenda como inmortal invicto. CONTINUARÁ...


El Regente desdichado

(En algún lugar del Reino Adaseuq)

Los innumerables errores cometidos por parte de mi linaje solo son el preludio de las catástrofes que yo me he atrevido a desencadenar. Amargado por mi culpa, continúo viviendo en pos de la promesa que le hice a aquel hombre. Quizás, en un futuro, eso sea lo que nos redima por completo a todos. Muy probablemente, mi castigo sea el no poder llegar a verlo, la verdad es que no me gustaría morir en el intento sin saber que, el convocado, lo consiguió. Por esa misma razón lo he hecho llamar, él será completamente capaz lograrlo, esa divina misión que yo, por los achaques de la edad, ni en sueños podré desempeñar…


Fragua de la creación

(Esencia de consciencia) 

En primer lugar, sentí calor, luego aparecieron los sentimientos que me impulsaron a poder concebir todo lo que me rodeaba. Esas imágenes multicolores completamente distorsionadas incluso me cegaban antes de centrarse en algo perfectamente definible. Aún no lo sabía, pero no estaba solo, junto a mí había otros como yo. Quizás el poder verlos con una forma determinada me hizo caer en la cuenta de preguntarme; ¿qué soy yo y cuál es mi objetivo? Todavía no he hallado la respuesta, pero el ansia de explorarlo todo es más fuerte que nada. Necesito conocer, ansío saber y deseo existir.


Reflexiones del guerrero errante

(En algún lugar del vasto reino de Zepol)

Aún no sé por qué me ha convocado, ese desaprensivo dirigente que ha marginado a su pueblo y ha cometido las mayores atrocidades descritas por el ser humano. Aun así, mi moral no me permite rehusar su propuesta, ya que a ambos nos vincula él. Todavía recuerdo que antaño me habló de sus debilidades y, como quien dice, me siento en la obligación de, por lo menos, escuchar lo que tiene que decirme. Desconozco qué es lo que querrá, pero por si acaso, me iré preparado para lo peor. En el caso de que todo se tuerza tengo una vía de escape, el antiguo bosque me protegerá…


Relatos del brillante guerrero

(En algún lugar de las colosales llanuras de Vilinia)

Si me lo dijesen no me lo creería, que ese viejo decrépito soportase sin mayor dificultad la mística peregrinación y todas y cada una de las pruebas a las que nos han ido sometiendo.

Está claro que ese hombre es la prueba viviente de que las apariencias engañan. Quizás sea un ser mágico o qué sé yo, lo que está claro es que su resistencia y la forma en la que afronta las penurias cotidianas, son dignas de admiración, espero y deseo que ambos formemos equipo, ya que eso garantizará mi victoria definitiva en esta difícil prueba. Porque solo la fe nos llevó hasta aquí y trabajando en equipo, no tengo duda de que lo conseguiremos…


Reflexiones del temerario delegado

(En algún lugar de Norien Olta)

Si bien es cierto que los Dioses nos castigaron privándonos de todos nuestros avances, no entiendo por qué nos culpan al hacer lo que teníamos que hacer, en todas las sociedades hay guerras, en eso se basan las civilizaciones que aún quedan. Para colmo, trascurrido un tiempo desaparecieron y aun habiéndonos castigado sin compasión mediante la involución, estos nos retaron a que intentásemos desafiarlos en el caso de que pretendiésemos generar cualquier suministro alternativo de energía con la firme amenaza de destruirnos. ¡Locos inmortales!, son unos necios si piensan que personas que lo han perdido todo, no intentasen volver a lo que tanto ansiaron y que les fue vilmente arrebatado…


Reflexiones del legendario ladrón

(En algún lugar del planeta Destino 16)

Oculto entre las sombras me dispongo a hacer lo que se tiene que hacer, sé que nunca seré recordado por lo que antaño fui sino como todo lo contrario. Un arrogante ladrón sin honor alguno, en definitiva, ese será el rol que me tocará desempeñar por el bien de toda la humanidad.

En mi modesto pesar, mi único deseo es que todos aquellos chicos estén sanos y salvos, si bien es cierto que, por ahora, están mejor ocultos que yo, no obstante, no puedo evitar preocuparme porque ya no hay marcha atrás, jamás regresaré, ya que mi tiempo aquí ha acabado, está todo hecho y mi presencia en este mundo está directamente marcada por los sucesos futuros que, al igual que títeres del dichoso destino, tendrán que sucederse…

En mi incierto futuro espero encontrar algo con lo que aliviar todo lo que dejo, deseo tener familia y una vida plena, eso es lo que supongo que llegará a calmarme con el determinante paso del tiempo, pues, nuevamente volveré a englobarme dentro del ciclo eterno de la vida y la muerte, proceso del que nadie, ni los propios Dioses, deberían escapar…


Pensamientos del osado delegado

 (En algún lugar de la región de Zuran)

En las profundidades entrelazadas de un bosque antiguo, donde los árboles se elevaban hacia el cielo como si ellos mismos buscaran algún divino perdón, un hombre caminaba con la determinación de los condenados. La locura le había dado un nombre, pero el mundo simplemente lo conocía como José, el Buscador Desesperado. Llevaba consigo uno de los anillos Ouler y el candil que heredó; esos artefactos mágicos cuya existencia se debía a un dios esquivo que los abandonó. 

José murmura para sí mismo, cada palabra, una mezcla de venganza y resolución. Su búsqueda no se basaba en la lógica ni en consejos sabios, sino en un sentimiento abrasador de traición. El anillo de su dedo brillaba débilmente bajo la luz tamizada de la luna y la llama del candil mágico lo guiaba en un recordatorio constante que dejaba clara la promesa de vengarse de él.    CONTINUARÁ...


Travesía en cautividad

(La inexperta chica y el grandioso guerrero)

En el árido crepúsculo del desierto, el viento portaba susurros de arena y secretos antiguos mientras acariciaba las armaduras resplandecientes de un pelotón de guerreros que se movía con determinación hacia el este. Al frente de esta columna, cabalgaba un guerrero cuya armadura no solo destellaba con el reflejo de las últimas luces del día, sino que también parecía vibrar con un eco de nobleza olvidada. Las historias de su bravura y temeridad le precedían como las sombras preceden al atardecer.

Junto a él, mantenida a una distancia respetuosa por dos firmes escoltas, cabalgaba una niña de no más de quince años, con el cabello como cascadas de cobre y los ojos inundados de una mezcla de miedo y fascinación. Desde su posición, observaba cada movimiento del guerrero, cada gesto que sugería algo más allá de la estricta disciplina militar que su armadura podía proyectar... CONTINUARÁ...


Pensamientos del temeroso delegado

(En algún lugar de la región de Mestral)

¿Seré capaz de soportar el peso de las personas inocentes que tendré a mi cargo en un futuro y que dependerán de mí? ¿Cómo hacerlo si fui incapaz de proteger a lo que más quería por no enfrentarme a mi propia familia? Si no pude antes no podré ahora, por eso necesito idear la forma de gobernarlos a todos sin necesidad de tomar decisiones capitales que definan el destino de mis súbditos, en ese caso, quizás la forma más correcta posible sea delegar lo delegado hasta el próximo pase de poder...


El rey arrepentido

(Reflexiones de alcoba)

En mitad de la noche, rodeado del absoluto silencio, me aterra pensar que alguna vez pueda llegar a recaer. Está claro que el poder corrompe si eres un ser Humano. Eso me lleva a la conclusión del porqué de esa debilidad nuestra. Quizá sea verdad que nuestra raza es la degradación de aquellos seres benditos, un subproducto de lo que querían los Dioses que llegasen a ser. Si eso fuese así, ¿por qué razón nos permiten seguir viviendo?, esa insensata decisión de someternos a nuestra corta la mortalidad con ese sentimiento intrínseco por seguir viviendo... No comprendo porqué aprueban que nos descontrolemos, que hagamos daño a nuestros seres queridos y que lo destruyamos todo a nuestro paso. Quizás ese sea nuestro castigo por aquello que hicimos, que, en nuestro lecho de muerte, con la esperanza de que transcenderemos si hemos sido justos a lo largo de nuestras vidas, soñemos con la esperanza de que ellos nos salvarán en el último momento justo antes de que se extinga esa chispa de vida que nos otorgó nacer... 


Pensamientos del delegado confiado

(En algún lugar de la región de Pilpo)

Dicen que para hacer buenos amigos es necesaria la confianza y cuanto más se obtenga entre ambas partes más se fortalece es esa amistad, pero ¿cómo atreverse cuanto hay tanto desnivel social? Soy consciente de que todo el que se me arrime desea escalar socialmente a fin de enriquecerse gracias a mi influencia, no soy estúpido y por eso desearía que ese asunto no fuera de esa manera, pero lamentablemente parece que así es. Algunos dicen que siempre queda el beneficio de la duda, a mí me gustaría pensar que sí, de hecho, tengo la esperanza de encontrar alguna vez a alguien que simplemente quiera verme y tratarme como un igual. Porque nada nos engaña tanto como nuestro propio juicio y nada es tan difícil como no engañarse a sí mismo, ojalá existiese algo que disipara esas falacias, no hay duda de que ese objeto sería mi tesoro más preciado...


El lamento del guerrero

(En algún lugar de la Montaña de Cristal)

Si por mi fuera mataría a todo sucio ruin que hablase mal de ti. Sabes perfectamente que hagas lo que hagas jamás te odiaré, eres la persona más importante de mi vida, el único ser Humano que merece la pena salvar. Algunos dicen que con la familia se nace, pero yo afirmo que eso no es así, los lazos que nos unen jamás serán destruidos.

Es gracioso que diga esto ya que todo el mundo conoce mis profundos sentimientos de odio hacia toda tu raza, esas continuas calumnias que mi boca profiere sin cesar son bien reputadas entre los míos. Lejos de la realidad, sabes perfectamente que mis pensamientos son sinceros de corazón, tanto los unos como los otros, y si bien es cierto que en innumerables ocasiones me has salvado la vida, también es innegable que en los momentos más difíciles ahí estuviste, tu grácil y sincera sonrisa ante las adversidades siempre acrecentó mi deseo por vivir y por luchar, créeme si te digo que mientras estés presente en mi memoria, aunque me duela admitirlo, te estaré en deuda por siempre jamás. Detesto que todo ocurriese de esa manera que cuentan y por eso todavía me pregunto: ¿Por qué tuviste que desaparecer? ¿Por qué soportaste esa carga tú solo y no contaste conmigo? Quiero que regreses amigo mío, sin ti algo me falta... Espero que, estés donde estés, te encuentres bien...


El pequeño chico y el viejo hombre 

(El algún lugar de Planeta Destino Dieciséis) 

Ese misterioso encapuchado no deja de sorprenderme, ya hace más de una semana que lo acompaño y lejos de querer hacerme algún daño está mostrando mucho hincapié en que aprenda todo tipo de cosas.

Al igual que un maestro lo hace con su discípulo se esmera mucho en que sea educado y cortés con todo el mundo y sobre todo incide demasiado en ciertos valores que según él jamás deberían perderse.

La mente abierta, la compasión, el perdón, la humildad y el porqué de las cosas; son solo unos cuantos de los muchos principios que me está inculcando.

Él alega que soy como un recipiente vacío que ansía ser llenado por el líquido más preciado. Filosóficas palabras dignas de un gran sabio...

Todavía recuerdo el día que se presentó en mi hogar. Allí lanzó la propuesta y en contra de los pensamientos de toda mi gente, yo sentí que debía acompañarlo. Un huérfano y un anciano, menuda combinación, quizás él desee tener alguien que, en un momento dado, lo pueda cuidar cuando ya no pueda más. Lo que está claro es que yo me encuentro muy bien con él y algún día, aunque no se lo diga expresamente, lo atenderé cómo se merece, al igual que lo está haciendo conmigo...


El sereno estratega

(En el algún lugar del mar Beracico)

Feliz cuando surco el inmenso océano, un extraño sentimiento invade hasta el último ápice de mi ser... Medio confundido siempre me hago la misma pregunta a bordo de mi navío a contra tempestad: ¿Cómo puede llegar a sentirse alguien libre estando a merced de la brutal fuerza del oleaje?  Al igual que un títere del dichoso destino, podría decirse que solo cuando me encuentro en alta mar, mientras la fuerte climatología azota mi delgado y curtido cuerpo, soy capaz de concentrarme, pensar fríamente y elaborar mis múltiples e infalibles estrategias. Como si se tratase de una fuerte adicción me veo en la obligación de aceptar cualquier incursión marítima por el simple hecho de sentirme completo. Puede que, gracias a esta rara motivación, consiga lo que me propongo en el lejano reino Impío. La convocación por parte de los Dioses dirigida hacia todo ser viviente capaz de afrontar sus pruebas es sencillamente una propuesta atractiva. Con ilusión deseo que, si supero esa tediosa aventura pueda conocer en persona a mi gran ídolo. Éste no es otro que el gran Sean, dios elemental del agua. Quizás él me explique el significado de mi misteriosa pasión por los océanos y mares, sentimiento inculcado en lo más profundo de mi corazón...


El aguerrido renegado 

(En alguna taberna de Norien Olta) 

Ebrio sostengo mi vaso con rabia mientras pienso en lo injustos que llegaron a ser. Cómo pudieron, los representantes de la Humanidad, condenarlos a todos de esa forma. Si fuese cierto lo que dicen, que somos sus creaciones y por ende como sus propios hijos, ¿por qué razón nos castigaron a todos por igual? Es como si por un par de manzanas podridas dentro de una cesta, tuviésemos que desecharlas todas sin distinción. Menudas Divinidades, son unos ineptos, si son tan sabios y justos como alejan ser, ¿por qué razón no fulminan a los responsables directos de aquellas barbaries? ¿Por qué permiten el clasismo entre sociedades y personas? y lo más importante de todo... ¿Por qué caminan entre nosotros alegando ser nuestros iguales cuándo no lo son?...

Reflexiones del sensato rey

(Palacio Real de la región de Galapia)

Cuenta la leyenda que si un guerrero es capaz que superar todas las pruebas impuestas por los Dioses puede anhelar el llegar a ser un semejante a ellos. Lejos de creerme tal patraña, si hubiese vivido en esa época ni me hubiese molestado en acudir al llamamiento. Un ser Humano jamás será capaz de aspirar a convertirse el un ente creador de vida, solo tenemos que analizarnos a nosotros mismos, nos mueven sentimientos tales como la codicia, la envidia y la sed de poder sobre el resto de los sujetos con los que tenemos que convivir, ¿cómo un semejante de esas Divinidades puede tener cuán dañinas motivaciones? Ni que decir tiene que con relación a la gente que fue, solo por haber asistido, para mí serían descartados por su falta de humildad hacia el prójimo. Por eso, siendo consciente de mis palabras, me centraré en lo que de verdad importa; gestionar la estabilidad social con diplomacia, dando, en su justa medida y con cierto control, lo que unos y otros quieren en este vasto reino que me ha tocado gobernar...


El incansable caminante

(En algún lugar de la gélida región de Dilvasur) 

Sé que nadie nos comprenderá, pero ¿quién son ellos para juzgarnos a nosotros? Tengo que admitir que nos devoró la carga que nos impusieron, eran muchas las tareas a desempeñar en una sociedad llena de odio y resentimiento. Solo bastó que se fuesen para que se desencadenase el caos y la destrucción... Lejos de sentirme culpable por aquello, yo seguiré en mi línea, proteger a los inocentes allá adónde vaya, en mi continuo viaje de autoconocimiento propio...


La extraña búsqueda de las Amazonas

(En algún lugar de la extensa jungla de Bolinia)

Junto a mis hermanas y con nuestros fieles compañeros cruzamos este mágico territorio en busca de la verdad; según nos contó aquel astuto ladrón, la gran jungla de Bolinia escondía secretos insospechados que, en un futuro, hallados y bien utilizados, podrían beneficiar a nuestro pueblo. Raro fue que confiásemos a un vulgar hombre y aún más que emprendiésemos esta larga cruzada, en pos de algo que ni siquiera hubimos visto.
Con la fe como estandarte, nos adentramos sin rumbo fijo, una modesta expedición que esperemos no se cobre ninguna vida más.

El mensajero Estratos

(En algún lugar de la región de Fotimeta)  

Estos seres Humanos nunca dejarán de sorprenderme, aún sabiendo que el caos y la destrucción nos acecha a la vuelta de la esquina, son incapaces de dejar a un lado sus diferencias y continúan inmersos en la cotidianidad de sus vidas, atesoran el dinero y se aferran a sus bienes más preciados cuán mentira piadosa fuese todo lo encontrado en pos de su inmediato destino... ¡Estúpidos locos! ¡El mundo está perdido!


La Santa Orden de los Aguerridos

(En las extensas llanuras de Vilinia)

Lo que antaño juramos proteger con nuestras vidas fue el vasto Destino Dieciséis; siendo garantes de los principios inculcados por nuestros maestros los Dioses; el honor, el valor y la justicia, no dudamos en que hallaremos sin descanso, vagando por el extenso mundo, a todos los portadores de la Esencia Perdida, mientras conservamos el equilibrio de las sociedades, siendo esos nuestros claros objetivos y nuestro principal consuelo en la casi infinita vida que nos toca vivir...


Reflexiones prohibidas

(En algún lugar de la isla Taimiel)

¿Por qué los seres Humanos hacen las cosas que hacen? ¿Por qué ese sentimiento de inferioridad con el resto de las razas? Si nos comparamos con las conductas de los Estratos, no podría tener la mayor certeza de que, somos completamente superiores tanto en intelecto como en voluntad. La fe en nuestra continua evolución nos hace creer en cosas que no vemos y cuando todos esos sentimientos los fijamos en uno solo, no hay duda de que generamos una fuerza superior a la magia, eso nos dota con la capacidad de superar cualquier adversidad. Por eso, basta de aferrarnos en el acto presente, ya que la continuidad de nuestros actos siempre tendrá un eco en la historia pasada, sucesos por los que todos los que nos rodean, en un futuro, nos recordarán...


El fatigado agricultor

(En algún lugar del reino Adaseuq) 

Según cuentan los antiguos, desde que el dios Sax desapareció, ese boscaje letal y salvaje, parece gozar de vida propia. Como si de un titánico coloso de madera y follaje se tratase, toda su demarcación es abrigada por el magnificente árbol milenario; señal inequívoca de que nos encontramos en el reino Adaseuq. Si digo la verdad, desde siempre ha estado ahí; tanto mis padres, como los padres de mis padres lo recuerdan, ese magnificente árbol abriga con sus kilométricas ramas la tortuosa flora del bosque espeso y da cobijo a toda fauna que necesita ser protegida, otorgándoles a los animales un punto seguro contra los seres Humanos que quieren hacerles algún daño. Eso lo convierte en el último sitio al que querer ir si gozas de la cordura suficiente, de la humanidad necesaria y de una pizca del preciso sentido común.

Sus lindes, separan caminos y sendas entre delegaciones y otorgan cierta individualidad con los demás términos, algo que no sé si será bueno o malo... Compadezco al pobre extraviado que no conozca las tenebrosas leyendas que ese lugar alberga y que se desplace errático, sin saberlo, hacia sus peligrosos caminos...


Reflexiones del héroe mancillado

(Muro de Galp, región de Galapia)

El concepto de destino, a mi parecer, se limita a una mera creencia sin sujeto, jamás se tiene experiencia de ello ya que solo aparece en las mentes racionales como un haz de sensaciones impalpables, puro fluir de actos de conciencia de un ser, pero no como un yo, único y sustancial, por eso la sucesión de esos fenómenos imaginarios, que por habito tendemos considerar necesarios, son mera percepción ¿Será real la creencia que todos tenemos sobre el destino? O por el contrario es pura ficción de la mente de un ser inferior, una quimera que oculta, en realidad, la ilusión utopía sobre el auto convencimiento de lo que se quiere hacer en contra de cualquier ética o moral de uno mismo; un pretexto de pura compasión hacia alguien por imposición propia... 


El Dios esperanzado

(Reflexiones hacia el desigual)

Cuando al ser humano, por muy perverso que haya sido con anterioridad, descubre qué concretos sucesos lo llegan a conmover, rápido le es mostrado por su propia consciencia la manera de desahogar su espíritu. Esa sincera forma de demostrarse a sí mismo que lo bueno y lo honesto debe ser salvado, reconvierten al ser, desnudando su verdadera e inocente esencia. Pobres de los seres vivos garantes de la razón que no descubran esa capacidad de sentir por todo lo que les rodea y que únicamente ellos mismos son capaces de salvar.


Reflexiones del proyecto Alcanzor "guerrero definitivo"

Laboratorio secreto en Algún lugar del planeta destino dieciséis)

El ser Humano, al ser un animal racional, obligatoriamente tiende a relacionarse con sus afines por sentimientos egoístas y egocéntricos tendentes al reconocimiento por el resto de sus iguales, pero no os confundáis, para alcanzar la iluminación hay que desenamorarse de la vida. La única verdad aquí es que nacemos y morimos solos, pero al atender la razón es arduo complicado llevarlo a cabo... Los seres adaptativos como todos nosotros, somos incapaces de mantenernos en la misma estabilidad emocional por un tiempo prolongado. No obstante, a mí me crearon para ser todo lo contrario, por eso dicen que soy, el guerrero definitivo... 


Conversaciones anónimas en la fragua de la creación

(En algún lugar de destino cero)

El ser genera esencia; la fuerza, forma la universalidad; la causa tiene siempre un efecto; todo ello regulado por el finito, que rige la mortalidad... Dices que existen seres Humanos mágicos... Quizás toda esa subespecie lo sea cuando aprendan a utilizar el intelecto. Lejos de todas estas divagaciones, esa diferencia es la diferenciación de la mediocridad ya que estoy totalmente seguro de que nunca llegarán a alcanzar a nuestras creaciones más preciadas...

Puede que te equivoques, ya que en ellos brilla algo hasta ahora desconocido, eso a lo que ellos llaman, fuerza de voluntad...


Secretas confesiones de la Matriarca

(Rezo junto al monolito Zaz "Lacdenia")

Querida hija, esto que pienso jamás te lo diré, creo que nunca estaré preparada para hacerlo, soy consciente de que decidí engañarte y hacer que perdieses la oportunidad de ver un mundo impresionante, en verdad te digo que todavía eres joven y gracias a Vuldo sé que no te pasará nada en el exterior, es el mejor consejero que nunca nadie podría tener.

Debo confesar que mi fuerte temor era mi gran depresión, quise arrastrarte a mi propia desesperación, pero al final solo prevaleció tu peculiar forma de amar. Agárrate siempre a ese sentimiento porque ese fuerte estímulo embravecerá tu corazón para afrontar cualquier adversidad.

¡Corre hija mía, alcanza la superficie, cumple tus sueños y toca las estrellas bajo el juramente de qué siempre serás mejor persona que cualquiera que te subestime o no te quiera!


Reflexiones de un Portador de la Esencia

Entre el primer latido que otorga el ansiado nacimiento y el último que desata la muerte de cualquier ser vivo del universo se genera el preciado tiempo del que se nutre el ente supremo que rige todas nuestras vidas, por esa razón existimos y a cambio le otorgamos el poder ser omnipotente, omnisciente y eterno.


Reflexiones del Profetizado

 (La senda del auto convencimiento) 

El concepto que rige el destino de los hombres, vaga resonancia en mis pensamientos... A mi parecer, esa inquietud se limita a una mera creencia sin sujeto, jamás se tiene experiencia de ello ya que solo aparece fugazmente en las mentes racionales como un haz de sensaciones impalpables, puro fluir de actos de conciencia de un ser, pero no como un yo, único y sustancial. Por eso la sucesión de esos fenómenos imaginarios que por habito tendemos considerar necesarios, son mera percepción; al saber eso, yo me formulo la siguiente pregunta: ¿Es real la creencia de los seres vivos sobre el concepto de lo que ellos llaman inmutable situación formada por el destino propio? O por el contrario estamos hablando de pura ficción de sus mentes, una que oculta en realidad la ilusión utopía sobre el auto convencimiento de lo que se quiere hacer en contra de cualquier ética propia del individuo en sí; puede que necesiten ese pretexto para lograr equiparar en sus mentes el compadecerse del prójimo y de esa forma justificar sus impulsos egoístas...


Esencia de la ética pura olvidada 

Si eres capaz de transformar la pena en alegría; el orgullo en perdón; o la agonía en esperanza desinteresada, ya no le deberás nada al mundo que te ha visto nacer.
Eso solo puede conseguirse conociéndose a uno mismo; aprendiendo a percibir todo lo que te rodea: es muy fácil, solo transforma lo que captan tus sentidos en emociones puras, eso te revelará la verdad. Con esa experiencia tendrás el poder de transformar las caóticas sociedades, a voluntad.